Las relaciones sanas son aquellas en las cuales te sientes libre, pleno, son un gran apoyo emocional donde se ofrece la posibilidad de compartir amor y felicidad, produciendo un gran bienestar. Estas relaciones son muy importantes en nuestras vidas por que nos ayudan a crecer y a evolucionar como seres individuales y sociales, y pueden ser tanto relaciones de amistad, como de pareja, familia, hermanos, hermanas, madre, padre. Las relaciones interpersonales tienen como base el respeto mutuo, la confianza, la comunicación, el estar, el compartir, la aceptación.

 

La dependencia emocional es un infierno, solo quien ha salido de ahí de manera consciente sabe de que hablo, del dolor que te invade que sientes que no puedes respirar, que cada célula de tu ser esta rota, aniquilada, no ves salida, sientes que estas perdido, no hay calma ni cuando estas despierto ni dormido, y quieres salir de este estado cuanto antes, porque el dolor te va matando.  Son relaciones desde una necesidad o carencia nuestra. Se activan nuestros miedos, frustraciones, creencias y asociaciones y esto hace que nos apeguemos más al otro, porque es mucho más terrorífico el miedo que tenemos a sufrir la perdida del otro que nuestro propio sufrimiento. Me relaciono con el otro desde mi ideario y no desde la realidad, y es esa realidad la que no quiero ver, porque nos crea frustración, dolor, rabia, angustia y miedo.

-Idealizamos tanto al otro que creemos que desde esa idealización se basa nuestra felicidad, siendo esta una falsa felicidad o felicidad idealizada.

-Nos abandonamos, ya que nuestras decisiones giran entorno a la otra persona, contando con su aceptación.

-Nos aferramos a una falsa seguridad.

-Creemos que carecemos de algo que el otro nos lo da, por eso buscamos a alguien que nos complemente

Es tipo de relaciones codependiente, existe un demandante que es el que pide, y un demandado que es el que da. Si miramos mas de cerca a estas relaciones ninguno de los dos pone limites, y vemos que hay un movimiento donde se mueven los miedos y las carencias de ambos, generando un vinculo desde una necesidad insana. Para romper la dependencia debemos que conocernos interiormente, hay que saber como funciona nuestra mente, cuales son nuestros patrones, nuestras creencias y nuestros programas limitantes. Muchas veces nos relacionamos con el otro desde nuestro ideario y no desde nuestra realidad, y es esa realidad la que no queremos ver, por lo que se crea una frustración la cual nos lleva a la tristeza, a la rabia, a los comportamientos insanos para nosotros y para relación con el otro. Donde hay amor no hay lugar para el apego o la dependencia, mientras el amor te hace libre la dependencia te esclaviza y te inutiliza como ser.

 

Abrir chat
Hola
¿En qué podemos ayudarte?