¿Que debes de dejar ir? Todo lo que te limita, todo lo que no te deje avanzar, todo lo que te conecte con el apego, o te conecte con el miedo al cambio, todo lo que te cause malestar psicológico, todo ello es lo que tienes que dejar ir. Aquí os expongo varios ejemplos:
-Personas: parejas, exparejas, familiares, amigos, compañeros, hijos, etc.
-Situaciones que te han causado malestar emocional, o que te sigue causando malestar psicológico.
-Procesos de duelo.
-Patrones, creencias, hábitos, convicciones, valores familiares, etc.
-Trabajos.
-Procesos evolutivos: juventud, belleza, el físico que teníamos años atrás, o el no aceptar que no tenemos la misma salud, etc.
-Emociones y sentimientos.
No dejas ir porque tienes una sensación de seguridad, por miedo a la perdida, por miedo al cambio y por miedo a salir de tu zona de confort. Hay dos emociones que mueven tu mundo, el amor y el miedo, mientras una te hace ser libre, el amor, la otra te limita, el miedo. Esta última te limita en el proceso de soltar porque a parte de sentir miedo, sientes culpa, fíjate bien como cuando te resistes a dejar ir todo lo que te limita, como es el miedo el que se encuentra en primera instancia convirtiéndote en esclavo de programas que ya no te van bien y que no te ayudan a tu nueva construcción. Tengo la opción de o aceptar o la de resistir, cuanto más resistas m´ss vas a sufrir. No tengas miedo al miedo, debes de reconocerlo, debes utilizarlo como un potenciador y no como un inhibidor, debes darle la vuelta, el miedo en su justa medida nos ayuda pero como pase de nivel de intensidad nos atrapa.
La sensación de perdida te limita porque generas una fuerza o una energía opuesta a soltar, el apego, porque «si lo suelto lo estoy perdiendo», y es ahí donde te atas y te limitas. Para suplir una perdida tu mente busca adicciones o apegos. El apego o la dependencia es la raíz de nuestros sufrimientos, porque decir adiós es duro porque significa cambios, y sino lo hacemos dejamos ciclos abiertos y eso causa mucho dolor emocional, ten presente esta premisa en tu crecimiento personal, “nada es permanente ni definitivo, cierra para poder avanzar”. Nos atamos o nos apegamos por es miedo al cambio y es ahí donde el surge el dolor, y sufrirás en la medida que te resistas. La vida es cíclica, esta en continuo movimiento, lo que te rodea evoluciona, entonces ¿porque te resistes al cambio? Porque no quieres salir de tu zona de confort es lo conocido, es el conjunto de estados mentales, hábitos, patrones y creencias que provocan un estado en el que te sientes seguro, confortable, y utilizas un comportamiento rutinario sin asumir ningún riesgo, es decir, como si hubieras puesto el “piloto automático”. Es una zona que sólo abarca lo conocido, ese ambiente donde estas a gusto y te hace sentir seguro porque todo está bajo control, pero donde no puedes crecer.
Cuando sales de tu zona de confort y no tienes miedo al cambio o a las posibles perdidas, te liberas porque empiezas a confiar en ti, dejas de controlar, y empiezas a fluir y dejar ir. Hay muchas personas que les cuesta salir porque sus miedos están aflorando constantemente, y se ponen en marcha por esa evitación, al final es un juego mental entre no poder y poder, y aquí hay mucho desgaste emocional y energético. En mis sesiones intento que la persona reconozca su zona de confort, y lo que existe allí dentro, viajamos los dos a su zona, y de manera amorosa y compasiva ponemos nombre y formas a todo, y marcamos un objetivo o varios dependiendo la persona. Se mueven muchos miedos, unos mas instalados que otros, hay muchas creencias y patrones, el trabajo será mas fácil cuando se ha puesto cara a todo ello. Pero no todas las personas pueden asumir o concebir poder salir de su zona como ella quisiera, entonces, no pasa nada, hay que empatizar con el ritmo de cada uno. La psicología positiva esta muy bien, siempre parece que podemos con todo lo que se nos pone enfrente, ¿y sino?. Nos han enseñado con muchos mensajes positivos que podemos conseguir lo que deseamos, que los procesos son rápidos, que encontrar pareja después de una ruptura es fácil, que el sufrimiento es opcional, que tenemos que ser funcionales desde la hora de levantarnos y hasta la hora de acostarnos, y un largo etc. Si no somos capaces de conseguir lo que nos exponen dichos mensajes nos invade como un tsunami el sentimiento de culpa, otro que nos limita y nos hace retroceder cuando hemos avanzado un poquitín. Asume tu forma de ser, asume como es tu zona de confort, asume lo que podrás y lo que no podrás soltar.
Tu ser interior y tu esencia es quien te pide que te liberes, necesita sentirse con menos pesos, con menos carga, y será tú mente la que intentará por todos los medios que no cambies, porque te necesita dependiente, lleno de apegos, de miedos, en fin, esclavizado, porque es su modus operandi, porque sino estará perdida. Para poder bajar a tu interior debes estar en consciencia, en el presente, debes de ponerle cara a todo lo que no te deja avanzar, y bloquear tu mente mediante la autoobservación. Eres el resultado de las huellas que te han dejado personas, situaciones, perdidas, heridas, patrones, creencias, y todo ello se encuentra en tu subconsciente y esta instalado allí por alguna razón. Tu eres el responsable de ti y de lo que quieres hacer con todo ello, no contengas, suelta y vive..
Yolanda
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